El 22 de abril se celebra el Día Internacional de la Madre Tierra, una efeméride oficial, proclamada por las Naciones Unidas en 2009.
Celebración que se da este año con una pandemia que ha representado un gran desafío la salud y la economía mundial, aunque ya tenemos la esperanza de superarla, gracias a la ciencia y a la cooperación internacional
El coronavirus produjo un gran sufrimiento a amplios sectores de la población, que vivimos la perdida de seres queridos y desbastadoras consecuencias en la salud y en la economía.
Pero la cooperación internacional, junto a la unión de las mejores mentes que sumaron sus esfuerzos para conocer el origen del mal y encontrar la forma de superarlo, permitió hallar en tiempo record la solución.
Con el inicio de la vacunación entramos en la etapa de la recuperación. Periodo que debemos aprovechar para hacer un balance y sacar lecciones de la tragedia vivida, y así enfrentar el futuro con mayor responsabilidad.
Aprendamos de la experiencia vivida para enfrentar el futuro con mayor responsabilidad
La gravedad del deterioro ambiental, exige un esfuerzo mayor al exhibido en la lucha contra el Covid.
Y tenemos como hacerlo. Si hay algo evidente con la experiencia vivida, es que el conocimiento de las leyes de la naturaleza, nos da las herramientas, para enfrentar un problema como este.
Por ejemplo, los esfuerzos de los científicos permitieron aislar al SARS-CoV-2 y secuenciar su genoma. Esto propició encontrar la solución en un tiempo menor al de situaciones similares en el pasado. No hubiera sido posible sin el grado de desarrollo de la ciencia y la tecnología que tenemos hoy.
Está pandemia, también nos enseñó la importancia de la cooperación internacional para enfrentar un desafío global. Pero en este tema, hubo sus más y sus menos.
La entrega del código genético a la comunidad científica mundial, por parte de los científicos chinos, permitió avanzar en el desarrollo de las vacunas. Al compartir el resultado de sus investigaciones sobre las características del virus, permitió que hoy tengamos varias ofertas de vacunas que ya se están aplicando.
Pero, por otro lado, los intereses económicos y políticos están retrasando la llegada de este beneficio a los sectores más vulnerables. Esto por actitudes como, la negativa a liberar patentes y el acaparamiento por parte de algunos países de las dosis de las vacunas,
El porqué del día de la madre tierra
Este es un día para meditar acerca de nuestra relación con la naturaleza. Porque eventos como la pandemia que vivimos, son recordatorios que nos hace sobre las responsabilidades que tenemos con el medio ambiente.
Es que asuntos como el calentamiento global, la contaminación ambiental y la deforestación amazónica muestran que los daños que hemos realizado a la tierra, están llegando a un punto de no retorno.
Con el nivel de desarrollo científico tecnológico que hemos desarrollado, tenemos las herramientas para enfrentar el problema. Si esto no se da es por razones que tienen más que ver con la forma como estamos organizados como sociedad.
El problema real y lo debemos afrontar en forma responsable para garantizar nuestra propia supervivencia. Debemos dejar de ver a la naturaleza como una fuente ilimitada de enriquecimiento y pensar en el mundo que heredaran las próximas generaciones.
Se requiere un debate franco y directo para hallar el camino a seguir para corregir esta catástrofe. Debate que nos permita lograr los acuerdos necesarios para desarrollar un tipo de estructura económica y social capaz de abordar estos problemas en beneficio de la Humanidad y no solo para favorecer a unas cuantas personas o sociedades o grupos.
Ante esto, recordemos las palabras de António Guterres, Secretario general de la ONU: “Debemos actuar con decisión para proteger nuestro planeta tanto del coronavirus como de la amenaza existencial de las perturbaciones climáticas.”